Pese a que en los últimos años parecía haber perdido importancia en los niveles de consumo de bebidas alcohólicas (siendo el whisky uno de los principales beneficiados, incrementándose su consumo), la ginebra ha experimentado un repunte, vuelve poco a poco a los importantes niveles de consumo que poseía. Ya sabemos que inicialmente surgió como remedio medicinal ante enfermedades sobre todo renales; pero posteriormente se le han atribuido otra serie de facultades beneficiosas en nuestro organismo, como su capacidad digestiva y diurética.
La ginebra tradicionalmente es incolora, clara, transparente. Pero conforme van pasando los años, internacionalizándose los mercados y aumentando los competidores, podemos encontrarla en diferentes tonalidades, ya sea en dorado, en azul, etc…
Es apta para ser consumida de diferentes formas: ya sea sola sin ningún añadido (pudiendo tomarla a temperatura ambiente, además de fría), o mezclada en forma de cóctel. Llegados a este punto, vamos a nombrar algunos de los cócteles más famosos compuestos a base de ginebra:
- El gin tonic: es sin duda uno de los más conocidos de todos y una de las bebidas más consumidas mundialmente. Consiste en añadir tónica a la ginebra, una bebida también digestiva, además de un poco de limón y de hielo.
- El Martini: mundialmente conocido y disfrutado como el gin tonic, el Martini se compone de ginebra, vermouth seco, limón y aceitunas. Se debe servir muy frío, por lo que se mezcla en una coctelera con hielo.
- El Pink Lady sería otro cóctel conocido, donde la ginebra se mezcla con límón, clara de huevo y con granadina para crear esta sorprendente bebida.
Todas estas elaboraciones son posibles gracias a la ginebra, que tiene entre sus marcas más representativas a las siguientes: Beefeater, Larios, Gordon´s, Tanqueray, Almirante Nelson, Bombay, G´Vine, Gin Brockman´s, etc…
En definitiva, hay multitud de marcas en el mercado. Tan sólo tenemos que elegir la que mejor se ajuste a nuestro paladar, según vayamos a degustarla o a mezclar con otros refrescos. Lo importante es saber beber con moderación y disfrutar del momento, paladear las sensaciones que la ginebra evoque en su ingesta, y saber el momento adecuado para escoger sus diferentes combinados (un gin tonic después de comer, o un buen cóctel un poco más tarde, etc…).